En un artículo anterior hablé sobre la importancia de los buenos modales en los niños, y cité como uno de los principales, decir “gracias”, esta palabra va un poco más allá de ser un simple modal a convertirse en un valor fundamental de vida, ser agradecido.
Desarrollar una actitud de agradecimiento, es algo enriquecedor para el ser humano, sea este adulto o niño, ya que incrementa el porcentaje de felicidad, y por ende, nos sentimos más satisfechos, con empatía hacia los demás, optimistas y hasta con mejor autoestima.
Para los pequeños, también se traduce en una satisfacción de vida en torno a su familia, pertenencias y juguetes y hasta con la vida escolar.
Pero hablar de agradecimiento es una cosa, y hacer que nuestros pequeños desarrollen este valor tan importante, es otra totalmente diferente. Nada fácil, si tomamos en cuenta que éstos, a los dos o tres años, por instinto…
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